El Libertador Simón Bolívar: hombre de verbo y acción

Prensa Vicepresidencia / Caracas, 24/07/2021.- Descendiente de una familia de origen vasco con destacada posición económica y social, Simón José Antonio de la Santísima Trinidad Bolívar Ponte Palacios y Blanco, nació en la ciudad de Caracas el 24 de julio de 1783.

Bolívar fue uno de los principales protagonistas del proceso independentista de Hispanoamérica. En la actualidad no sólo es recordado y honrado por promover y alcanzar la emancipación de Venezuela y de cinco naciones más de América, sino también por su amplio legado ideológico emancipador y antiimperialista que ha servido de inspiración para otros pueblos en distintos continentes.

Durante sus 47 años de vida, El Libertador desarrolló un amplio pensamiento político e impulsó grandes batallas y hazañas militares de gran relevancia para América del Sur, además de sus ideas liberadoras y emancipadoras. Bolívar fue un hombre de verbo y acción.

Simón Bolívar, es un líder universal que desde temprana edad se impuso contra cualquier violación de los derechos humanos, en especial a todo lo que atentara contra la dignidad humana. Es por ello que dedicó su vida a la liberación de los pueblos del Sur manteniendo presente los principios de libertad, justicia, valores morales y sociales como la dignidad, respeto, e igualdad.

Predicaba que para ser libres lo fundamental era la educación del pueblo, y su interés por la educación quedó inmortalizado en el apremiante aforismo que estableció en su discurso ante el Congreso de Angostura “Moral y luces son los polos de una República, moral y luces son nuestras primeras necesidades”.

Infancia y entorno familiar

El Libertador, fue el cuarto hijo del Coronel don Juan Vicente Bolívar y Ponte, y doña Concepción Palacios Blanco. Sus tres hermanos mayores fueron María Antonia, Juana y Juan Vicente. Hubo otra niña después de él, María del Carmen, que murió al nacer.

No había cumplido los tres años de edad cuando muere su padre en enero de 1786 y 6 años más tarde, en 1792, falleció doña Concepción. María Antonia y Juana contrajeron matrimonio y los hermanos Bolívar quedaron bajo el cuidado de abuelo materno, don Feliciano Palacios. Al morir el abuelo, Simón quedó al cuidado de su tío y tutor Carlos Palacios.

En julio de 1795, cuando cumplía 12 años, huyó del lado de su tío, para acogerse en la casa de su hermana María Antonia y su esposo. A esa edad comenzó a recibir formación del maestro Simón Rodríguez, quien estaba a cargo de la Escuela de Primeras Letras de la ciudad.

Rodríguez se marchó de Caracas en 1797, pero el niño Simón siguió su formación con otros maestros como Carrasco y Vides, los que le dieron lecciones de escritura y de aritmética, y al Presbítero José Antonio Negrete, profesor de Historia y de Religión, entre otros.

En enero de 1797, cuando estaba por cumplir los 14 años ingresó como cadete en el Batallón de Milicias de Blancos de los Valles de Aragua. Al año siguiente fue ascendido a Subteniente. El adiestramiento práctico en los deberes militares lo combinaba con el aprendizaje teórico de materias las matemáticas, el dibujo topográfico y la física, entre otros.

A comienzos de 1799, viajó a España. En Madrid, bajo la dirección de sus tíos Esteban y Pedro Palacios y la rectoría moral e intelectual del sabio Marqués de Ustáriz, se dedicó al estudio ampliando sus conocimientos de historia, literatura clásica y moderna, matemáticas, francés, esgrima y baile.

Más tarde, en Madrid conoció a María Teresa Rodríguez del Toro y Alayza, de quien se enamoró y con la cual contrajo matrimonio en 1802. Luego de contraer nupcias con la joven Rodríguez del Toro viaja a Venezuela, pero poco duró la felicidad de Simón. María Teresa murió en enero de 1803. El joven viudo regresó a Europa ese mismo año y se estableció en París desde 1804. La recopilación de los datos bibliográficos de El Libertador Simón Bolívar, reposa en la Biblioteca Virtual Miguel de Cervantes “Biografía de Simón Bolívar”, escrito por Manuel Pérez Vila.

Ilustre estratega militar

En Paris, Bolívar, sigue ampliando sus conocimientos y se reencuentra con su maestro Simón Rodríguez, quien se convierte en su compañero de conversaciones, lecturas y viajes. Van juntos a Italia y en Roma en 1805, en el Monte Sacro, Bolívar jura en presencia de su maestro no dar descanso a su brazo ni reposo a su alma hasta que haya logrado libertar al mundo Hispanoamericano de la tutela española.

Luego de este juramento en 1806, escucha hablar de los intentos realizados por el Precursor Francisco de Miranda en Venezuela y Bolívar considera que ha llegado el momento de volver a su Patria.

Manuel Pérez Vila narra de manera cronológica, en la “Biografía de Simón Bolívar”, que la vida pública del Libertador comienza el 19 de abril de 1810 cuando La Junta Patriótica, lo nombra en compañía de Luis López Méndez y de Andrés Bello, comisionado ante el Gobierno Británico.

A partir de esa fecha inician sus brillantes campañas militares, en las cuales alternarán victorias y reveses hasta 1818. A partir del año siguiente predominarán los triunfos, a la cabeza de un pequeño ejército comprometido con la causa patriota, el mismo ejército que le daría la libertad a Venezuela el 24 de junio de 1821 con la gloriosa Batalla de Carabobo.

Libertad e integración de América

A Simón Bolívar, se le conoce como El Libertador de América, título que consideraba su premio más preciado, a pesar de los numerosos homenajes que le tributaron las naciones americanas, éste era su máximo galardón los describió como “superior a todos los que ha recibido el orgullo humano”.

Desde 1812, encabezó la lucha por la independencia de América del imperio español logrando en los 11 años siguientes la liberación de un millón de kilómetros cuadrados específicamente en Colombia, Bolivia, Ecuador, Panamá, Perú y Venezuela “en la unidad de nuestras naciones descansa el glorioso futuro de nuestros pueblos”, dijo Bolívar en resumen de su sueño de una América unida.

Prensa Vicepresidencia / Javienny Chirinos

Contacto / ecosocialismoprensa@gmail.com