Prensa Ecosocialismo (Minec) / Caracas, 24/02/2025.-Este lunes, el Parque Nacional Santos Luzardo, ubicado en el corazón de la región de San Fernando de Apure, llega a 37 años de haber sido decretado como zona bajo resguardo.

El espacio es un bastión de biodiversidad y conservación ambiental, por la rica variedad de flora y fauna, muchas de ellas endémicas y que se encuentran en peligro de extinción.

Desde su creación el 24 de febrero de 1988, el Parque Nacional Santos Luzardo ha sido un destino privilegiado para investigadores, ecoturistas y amantes de la naturaleza.

Abarca los municipios Pedro Camejo y Achaguas del estado Apure, tiene una extensión de 584.368 hectáreas (ha), equivalente a 5.844 kilómetros cuadrados (km2), que lo posiciona como el cuarto lugar recreacional más grande del país.

En el territorio habita un 26% de mamíferos, 16% de aves y el 35% de los peces conocidos en Venezuela. Además, posee 67 tipos de anfibios y reptiles, 22 tipos de lagartos y 34 serpientes.

Este parque es también conocido como Cinaruco-Capanaparo, caracterizado por poseer médanos arenosos.

El parque no sólo es un santuario para la vida silvestre, sino que también desempeña un papel crucial en la economía local. Las comunidades cercanas se benefician del ecoturismo y las actividades sostenibles que promueven la conservación del ambiente.

Las autoridades del parque han implementado programas de educación ambiental, que involucran a los residentes y visitantes en prácticas responsables que ayudan a proteger este invaluable patrimonio natural.

El acceso principal se realiza por la carretera nacional San Fernando de Apure-Puerto Páez, pasando por la población de San Juan de Payara, hasta la comunidad de La Macanilla.

Entre los sitios de interés se cuentan las Galeras del Cinaruco, una formación rocosa perteneciente al Escudo Guayanés.

Prensa Ecosocialismo (Minec) / Gabriela Garcés
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